jueves, 21 de noviembre de 2013

De dónde vengo y hacia dónde voy

Estos días no paro de pensar que hacer de nuevo con mi vida. No sé si coger las maletas de nuevo y volver. La incertidumbre y la dificultad para tomar decisiones en lo que concierne a mi vida personal me ha acompañado desde siempre. Parece que nunca he sido dueña de mi vida, que soy incapaz de tomar las riendas, de seguir adelante por mi misma. No me antepongo a mí misma como prioridad, siempre tengo en mente ¿y qué pensará mi familia? No dejo fluir mi deseo, ni mi libertad, por el miedo a que me descubran, por el miedo a defraudarles. 

A lo largo de un día puedo cambiar de opinión decenas de veces, y me está resultando muy complicado este duelo que mantengo conmigo misma. El ser consciente de saber de dónde vienen mis miedos y mis inseguridades en lugar de hacerme fuerte me vuelven más vulnerable, ya que a veces pienso que siempre seré así, que no puedo cambiar. 

Por más que intente pensar tú no tienes la culpa, sigo machacándome, haciéndome añicos, haciéndome cada vez más pequeña... No vale con mirarme en el espejo y decirme a mí misma eres estúpida, ya que necesito tantas veces autoinfligirme daño. Y llorar de rabia y de pena, y hacerme un ovillo en la cama. O crear en mi mente historias absurdas de amor. 

¿Cómo romper con ese caos tan dañino? ¿Cómo romper con estas idas y venidas vacías de sentido? 

Me vine a este país porque necesitaba irme de mi casa y empezar una nueva vida, eso era lo primordial, aprender inglés estaba a un segundo plano. Ahora quiero volver, no a mi casa pero sí a mi país. Un país que se está desmoronando, que se está rompiendo en mil pedazos, un país que agoniza, que está cayendo en picado hacia la pobreza y hacia la falta de derechos y libertades. Aquí me siento inútil, me siento impotente. 

No me gusta este país, no me gusta su gente ni su cultura. A ratos pienso que estirar un poco la estancia no estaría de más para aprender más inglés pero, estoy harta de esa falsa necesidad imperante de perfeccionar y aumentar tus conocimientos... ¿Qué putos conocimientos? ¿Los que demanda el mercado? 

Ahora tengo el suficiente nivel como para desenvolverme si quiero viajar, si quiero conversar con alguien en inglés. No tengo el suficiente nivel que demandan para un perfil profesional o para ingresar en una universidad. No tengo el suficiente nivel pero incluso si lo tuviera, es bastante probable que no tuviera acceso a ello. Por la situación actual que hay en España, está muy extendido el discurso de que es una pena que haya tantos jóvenes tan preparados y sin un futuro profesional a la vista. Lo que es una pena es que no haya trabajo en general y que las condiciones laborales estén retrocediendo a pasos agigantados. Que una persona tenga dos carreras, un máster, y dos idiomas, no la hace estar por encima de otra que no tenga estudios superiores ni idiomas ni pollas en vinagre. A mí lo que me jode de ésta situación, no es que no pueda alcanzar mis ambiciones profesionales ya que nunca las he tenido, lo que me jode a nivel personal es que estudiar y labrarme un futuro ejerciendo algo de mi agrado era lo que me mantenía a flote, lo que me mantenía seguir adelante, ya que ha sido la única parcela de mi vida sobre la que he tenido control. 


1 comentario:

Anónimo dijo...

Piensas, luego existes!!!! Mira al frente sin miedo y podras domar tu existencia....despacio....haz lo que ahora mismo te apetezca y desconecta. Mientras yo le dare otra calada para seguir creando tu historia.